Marte en Tierra

Un equipo de voluntarios nos acerca un paso más al aterrizaje en el Planeta Rojo, sin salir de la Tierra. 

Al leer, piensa en: ¿Querrías pasar un año en Marte? ¿Por qué sí o por qué no?

El verano pasado, Nathan Jones comenzó una misión de un año en Marte. Bueno, no exactamente. No abandonó la Tierra. Jones es uno de los cuatro voluntarios que viven en una base especialmente construida en el Centro Espacial Johnson de Houston, Texas. 

La misión se conoce como CHAPEA. Su objetivo es simular cómo sería una estancia de larga duración en Marte. La NASA, la agencia espacial estadounidense, se prepara para hacer aterrizar a los primeros astronautas en el Planeta Rojo en 2030. “Me enorgullece pensar que ayudo a la humanidad a ir al verdadero Marte”, dijo Jones.

Josh Valcarcel/NASA–Johnson Space Center 

Nathan Jones (segundo desde la izquierda) con sus compañeros de CHAPEA

La construcción de una base 

Un viaje real a Marte tomaría unos nueve meses. Una de las primeras tareas de los astronautas consistiría en usar una impresora 3D y otras herramientas para construir su estación.

La NASA trata de simular la experiencia lo más fielmente posible. Su base se asemeja a la que podría haber en Marte. Incluso se construyó con una impresora 3D. Tiene cuatro habitaciones pequeñas, dos baños, zonas de trabajo y muchas cosas más. La base es más pequeña que la mitad de una cancha de baloncesto. 

NASA/CHAPEA CREW 

Nathan Jones explora “el arenero” con un traje espacial.

Un año en Marte 

El equipo de CHAPEA se enfrenta a muchos de los mismos problemas a los que se enfrentaría una tripulación en Marte. Los astronautas que viajen al Planeta Rojo tendrían suficientes productos envasados que durarían años. Pero las frutas y verduras frescas no sobrevivirían al viaje. Así que los astronautas tendrían que cultivar las suyas propias. En noviembre, la tripulación de CHAPEA se las ingenió para recoger su primera cosecha de tomates y lechugas.

Comunicarse con el mundo exterior es también todo un reto. Si Jones tiene una pregunta para la NASA, tiene que esperar más de 40 minutos para la respuesta. Este es el tiempo que tardan en ir y venir los mensajes entre Marte y la Tierra. 

La NASA no recreó las brutales condiciones exteriores de Marte. La temperatura media es de -81 grados Fahrenheit. Pero la base de CHAPEA alberga un gran “arenero” para que el equipo explore. La tripulación camina millas en cintas de correr. Usan cascos de realidad virtual con imágenes del paisaje marciano. Antes de estos “paseos por Marte” se ponen lo trajes espaciales, igual que harían los astronautas en Marte. 

NASA/CHAPEA CREW 

Tras un largo día, el grupo juega una partida de ping-pong para relajarse.

Lejos de casa

La NASA supervisa de cerca la tripulación de CHAPEA. Pone gran atención en cómo se las arregla el equipo para vivir en aislamiento por tanto tiempo. La NASA también estudia cómo se lleva la tripulación entre sí en un espacio tan reducido. Para Jones, lo más duro es estar lejos de sus amigos y su familia. 

“Les extraño mucho”, dijo.

Aun así, Jones se muestra agradecido de formar parte de la misión, que finaliza en julio. Espera inspirar a los niños para que quieran viajar a Marte. 

“A lo mejor, alguien que lea esto podría incluso ir allí algún día”, dijo Jones.

NASA/CHAPEA CREW 

La tripulación usa guantes especiales para estudiar las rocas recogidas en “el arenero” marciano.

NASA/CHAPEA CREW 

Jones le corta el pelo a un compañero. ¡No habrá ninguna barbería en Marte!

1. ¿Por qué el autor señala que la base de CHAPEA se construyó con una impresora 3D?

2. El artículo dice que el equipo de CHAPEA se enfrenta a algunos de los mismos problemas a los que se enfrentarían los astronautas en Marte. Describe dos ejemplos.

3. ¿De qué trata la sección “Lejos de casa” en su mayor parte?