Cuando los juguetes se convierten en basura

Piensa en cualquier juguete que hayas tenido que se mueva, se ilumine o haga ruidos. Puede que sea un auto de carreras a control remoto, un videojuego manual o un perro robótico. ¿Has pensado alguna vez qué pasa con los juguetes cuando ya no quieres jugar más con ellos? Lo más probable es que terminen en la basura.

Cualquier juguete con enchufe o batería es un juguete electrónico. Según un informe reciente, en 2022 se botaron más de 7,000 millones de juguetes electrónicos en todo el mundo. 

Mucha gente no sabe que los juguetes electrónicos se reciclan. Y aunque lo supieran, reciclar aparatos electrónicos no es fácil.

“No deben botarse a la basura normal —dijo Callie Babbitt. Es profesora del Instituto Tecnológico de Rochester—. Tampoco se reciclan los juguetes electrónicos echándolos al bote de reciclaje fuera de tu casa”.

Pero Babbitt dice que hay formas de reciclar tus juguetes electrónicos viejos. Y hacerlo es importante para el medio ambiente.

Teléfonos, tabletas, tostadoras, televisores... Utilizamos muchos aparatos electrónicos a diario. En EE. UU. se producen más de 7 millones de toneladas de basura electrónica todos los años. ¡Es suficiente basura para llenar más de 400,000 camiones!

Los juguetes electrónicos son parte del problema de la basura electrónica. Todos los años se tiran a la basura miles de millones de juguetes electrónicos en todo el mundo. Según una estimación, cerca del 90% no se reciclan. La mayoría terminan en vertederos. Con el tiempo, las sustancias químicas de los componentes electrónicos de los juguetes electrónicos se filtran en la tierra y las aguas subterráneas. Esto pone en peligro a las personas y a la vida silvestre.

Y lo que es peor, muchos juguetes electrónicos contienen valiosos metales, como oro y cobre. Cuando los juguetes electrónicos no se reciclan adecuadamente, estos metales se desperdician.

¿Por qué no se reciclan más juguetes electrónicos? En primer lugar, mucha gente no sabe que debería reciclarlos. No es de extrañar, teniendo en cuenta la falta de regulaciones. En EE. UU., solo 25 estados y Washington D.C. tienen leyes sobre el reciclaje de aparatos electrónicos. Pero ningún estado tiene leyes que mencionen específicamente los juguetes electrónicos. Como resultado, muchos centros de reciclaje no los aceptan. 

También es más difícil reciclar juguetes electrónicos que otros artículos. Algunos juguetes electrónicos están pegados o atornillados, lo que dificulta el acceso a los componentes electrónicos de su interior. Además, algunos juguetes electrónicos contienen varios tipos de materiales, como plástico y tela. Los materiales deben reciclarse por separado, lo que toma mucho tiempo y dinero.