Al rescate

Estos niños estaban listos para enfrentarse a emergencias y ayudar a personas que estaban en peligro. 

Al leer, piensa en: ¿Te has encontrado alguna vez en una situación de emergencia? ¿Cómo reaccionaste?

La emergencia: incendio doméstico

La heroína: Kaliyah Harrington, 12 años

Una noche del otoño pasado, Kaliyah se despertó como a las dos de la madrugada. “Apenas podía respirar”, recordó Kaliyah. Saltó de la cama para averiguar qué pasaba y vio fuego en la estufa de la cocina. Las llamas empezaban a extenderse. 

Kaliyah no se asustó. Gracias a un simulacro de incendio en su escuela, sabía exactamente qué hacer. Se tapó la nariz y la boca con un pañuelo para bloquear el humo. Luego se tiró al suelo, donde hay menos humo. Kaliyah gateó hasta la habitación de su madre para despertarla. Luego despertó a sus hermanos pequeños. Incluso cargó con algunos de ellos al hombro y los sacó afuera. 

“Tenía miedo, pero estaba más centrada en intentar sacar a todo el mundo”, dijo Kaliyah. 

Los bomberos llegaron y apagaron las llamas. La casa quedó destruida. Pero gracias a Kaliyah, nadie resultó herido. 

Consejo de Kaliyah: “Trata de no dejarte llevar por el pánico. Si lo haces, no podrás pensar con claridad”.

La emergencia: asfixia

El héroe: Jake Salas King, 10 años 

La mañana comenzó como cualquier otra. El pasado abril, Jake y su amigo Kyan Burton estaban en su salón de clase de cuarto grado, terminando una prueba de lectura. De repente, Kyan empezó a asfixiarse. Tenía un caramelo atorado en la garganta. 

Su maestra, Althea Dixon, se acercó corriendo. Empezó a practicarle la maniobra de Heimlich. Es una técnica especial que puede ayudar a salvar a alguien que se está asfixiando. Se colocó detrás de Kyan y le rodeó el abdomen con los brazos. Luego cerró las manos en un puño y empujó hacia arriba el estómago de Kyan. Pero el caramelo no se movía. 

Fue entonces cuando Jake intervino. Siguió con la maniobra de Heimlich mientras Dixon llamaba a la oficina de la escuela para pedir ayuda. Jake había aprendido la técnica en casa unos años antes. Al poco rato, el caramelo salió. 

“Fue un alivio —dijo Jake—. Me sentí bien por haberle salvado”. 

Consejo de Jake: “Escucha tu voz interior. Puede ayudarte a tomar decisiones, sobre todo en caso de emergencia”.

La emergencia: ahogamiento

Los héroes: Christian y Bridon Hassig, 11 años, y Sam Ebert, 12 años

En junio de 2022, los gemelos Christian y Bridon jugaban con su amigo Sam. El padre de los hermanos, Brad Hassig, estaba en la piscina, cerca. Christian vio que algo iba mal. Su padre estaba flotando boca abajo.

“Su cara se estaba poniendo azul”, dijo Christian. 

Bridon y Sam saltaron a la piscina y sacaron a Hassig. Christian corrió en busca de ayuda. Hizo señas a un auto y le dijo al conductor que llamara al 911. 

Mientras tanto, Bridon comenzó la reanimación cardiopulmonar (RCP). Es una técnica que se usa cuando alguien no respira. Bridon empujó el pecho de su padre con ambas manos. Al principio no pasó nada. Pero al cabo de unos minutos, Hassig expulsó agua al toser. Cuando llegaron los paramédicos, llevaron a Hassig al hospital. Desde entonces se ha recuperado totalmente, gracias a la rapidez mental de los muchachos. 

Consejo de Bridon: “No nades solo. Ve siempre acompañado”.

1. Escoge dos de los niños que se describen en el artículo. Identifica una forma en que sus experiencias se parecen y una forma en que se diferencian.

2. ¿Qué pasos dieron Bridon, Christian y Sam para salvar a Brad Hassig? 

3. ¿Cómo apoyan el artículo las ilustraciones en estas páginas?