Los residentes de Phoenix, Arizona, salieron corriendo. La gente buscó refugio. Los conductores, aterrorizados, pararon sus autos. El aeropuerto local canceló los vuelos. Momentos después, una enorme pared de polvo se tragó la ciudad. Pronto le siguieron fuertes tormentas eléctricas que arrancaron árboles de raíz. Decenas de miles de personas en la zona se quedaron sin luz.
¿Qué fue este fenómeno meteorológico tan violento? Fue una enorme tormenta de polvo llamada haboob. Estas tormentas se forman cuando los fuertes vientos de las tormentas eléctricas levantan grandes cantidades de polvo y residuos al aire. La nube de polvo gigante que pasó por el centro de Arizona en agosto tenía unos 5,000 pies de alto y al menos 50 millas de ancho. La gente en el centro de la tormenta no podía ver ni a unos pocos pies de distancia.