Ir a la escuela todos los días puede ser gratificante. Pregúntaselo a los alumnos de la escuela primaria Featherstone de Woodbridge, Virginia. Allí los responsables organizan retos de asistencia. Los niños pueden ganar premios como meriendas, un día de pijama, ¡o incluso un pez dorado como mascota!
Otras escuelas del país también ofrecen recompensas para fomentar la asistencia. Los estudios demuestran que los alumnos que faltan 15 días o más en un curso escolar corren el riesgo de quedarse atrás.
“Queremos asegurarnos de que los alumnos van por el buen camino para tener éxito”, dijo la directora de Featherstone, Christina Treadwell. Como resultado de estos retos, las ausencias en Featherstone disminuyeron el curso pasado.
Pero los críticos sostienen que recibir una buena educación debería ser suficiente recompensa. Dicen que los niños no deberían esperar ganar premios por algo que se supone que deben hacer de todos modos.