El águila calva aparece en nuestra moneda, la bandera del presidente e innumberables edificios del gobierno. Pero no se convirtió en el ave nacional de EE. UU. de manera oficial hasta hace unos meses.
Sus poderosas alas representan fuerza e independencia. Lleva siendo un símbolo de EE. UU desde 1782. Seis años antes, los fundadores del país comenzaron a hablar de crear un sello oficial para la nueva nación. No se ponían de acuerdo en el diseño. Más adelante, Benjamin Franklin escribió que no le gustaba el águila calva. Pero esta poderosa ave fue por fin elegida para lucir en el gran sello de EE. UU. Hoy, el sello aparece en documentos del gobierno y en el reverso del billete de un dólar.
El águila calva solo se encuentra en Norteamérica. A mediados del siglo XX, estuvo amenazadas en gran parte de EE. UU. La caza y los productos químicos para matar insectos habían hecho que las águilas casi desaparecieran. Pero gracias a los esfuerzos de conservación, la población de águilas calvas se ha disparado en las últimas décadas.